https://appradiofm.com/wp-content/uploads/2020/05/index.html
http://portaldoaltotiete.com.br/upload/index.html
En una ceremonia que destacó por su colorido y participación de los alumnos, profesores y toda la comunidad escolar, la embajadora de la República de Filipinas, María Teresita Daza, y el alcalde Miguel Bruna encabezaron la entrega de dos funcionales oficinas administrativas al colegio República de Filipinas de Lo Espejo, este martes 12 de marzo.
Las flamantes dependencias fueron costeadas y donadas por quien se ha convertido en benefactor del establecimiento, el empresario filipino Roy Betinol quien preside la compañía internacional Brass para toda Latinoamérica.
Junto a las mencionadas autoridades, participaron en el acto protocolar y corte de cinta inaugural, la concejala Ana Sandoval, el jefe del Departamento de Educación, DEM, Carlos Salas; la directora de Dideco, Ingrid Rodríguez; la flamante directora del establecimiento, Verónica Carreño Moyano; el cuerpo de profesores y asistentes de la Educación y los mejores alumnos del ciclo 2019 del colegio, quienes recibieron un interesante estímulo por su rendimiento escolar.
Con la presentación de la asesora de la embajadora Daza, Paula Rodríguez, y del Inspector general del colegio, Sergio Ramírez, se interpretaron los himnos nacionales de Chile y de Filipinas, para dar paso luego al saludo de bienvenida de la directora Verónica Carreño, quien lo hizo en inglés y en español, por deferencia a la embajadora.
Por su parte, el alcalde Miguel Bruna, luego de saludar a la comunidad, agradeció y valorizó esta nueva donación de la embajada de la República de Filipinas que favorece al colegio del mismo nombre de nuestra comuna.
Y correspondió a los niños de tercero básico agradecer a su manera, con un baile folclórico filipino, derrochando colorido y graciosos movimientos con cadencia oriental y al ritmo de las cuerdas de los mandolinos.
Al empresario Roy Betinol lo hicieron recordar su infancia en Manila, y en su alocución contó que hace más de diez años conoció el colegio, “cuando ayudamos a poner el portón de entrada de la escuela, pero luego perdimos el contacto, hasta que el año pasado lo retomamos. Entonces vimos que las oficinas administrativas y de la dirección estaban muy apretadas, ocupando incluso parte de la biblioteca. Por eso se nos ocurrió hacer este aporte de las oficinas, que esperamos sea muy importante para los niños y profesores”.
En tanto, la embajadora de Filipinas, María Teresita Daza, recalcó en su discurso que “la educación juega un papel esencial en el desarrollo de los individuos, las sociedades y las naciones… Las escuelas no solo imparten conocimientos, enseñan habilidades, fomentan el pensamiento crítico y nos preparan para trabajar”.
Y demostrando que lo importante son los niños, se llamó al escenario a los mejores alumnos del proceso 2019, quienes recibieron una gran caja con los útiles escolares indispensables para su desempeño.
Quienes se ganaron los prácticos regalos son: Manuel Núñez, de primero básico; Martina Opazo, segundo básico; John Correa, tercero básico; Romané Aguayo, cuarto básico; Yanara González, quinto básico; Alexander Hueche, sexto básico; Vaitiare Gallardo, de séptimo, y John Sáez, de octavo.
Luego de los aplausos para los niños, las autoridades presentes procedieron al tradicional corte de cinta en el acceso a las nuevas oficinas, para degustar a continuación un delicioso buffet con sabores y aromas de Filipinas, acompañados de música y bailes tradicionales del gran archipiélago oriental.
Luego de un suave tema, “Saranggolani Pepe”, interpretado en su idioma natal por Francisca Díaz Rodríguez, ocho bailarinas filipinas mostraron su destreza en un baile acrobático, el “Tinikling”, realizado sobre bancas de madera, unas sobre otras, danzando y saltando a pie descalzo.